En una reunión celebrada en Corea del Sur, los presidentes de Estados Unidos y China, Donald Trump y Xi Jinping, respectivamente, señalaron avances significativos en sus relaciones bilaterales. Tras una reunión de 100 minutos, ambos mandatarios describieron el encuentro como un “gran éxito”, mientras expresaban sus expectativas de un futuro acuerdo comercial que podría materializarse “muy pronto”.
Trump, con su característico estilo, evaluó la reunión con una calificación de “12 sobre 10”. A bordo del Air Force One, el mandatario norteamericano indicó que considera esta cumbre como un paso positivo hacia la reducción de aranceles y el avance en negociaciones comerciales con China. Según sus palabras, los avances son tan significativos que la posibilidad de firmar un acuerdo comercial entre las dos mayores economías del mundo está al alcance de la mano.
“Supongo que en la escala de 0 a 10, siendo 10 el mejor, diría que la reunión fue un 12”, afirmó Trump, sugiriendo una satisfacción total con el desarrollo de las negociaciones. El presidente también destacó que en abril viajaría a China para continuar las conversaciones, mientras que Xi Jinping se comprometió a realizar una visita a Estados Unidos en el futuro cercano. La firma de un acuerdo comercial parece, de esta manera, más cercana que nunca.
Xi Jinping destaca la importancia de una relación bilateral estable
Por su parte, Xi Jinping expresó su disposición para seguir trabajando con Trump, con el objetivo de fortalecer los lazos entre China y Estados Unidos. Durante la reunión, el mandatario chino destacó que ambos países deben ser “socios y amigos”, y subrayó que las relaciones bilaterales, a pesar de las tensiones ocasionales, deben ser vistas como una prioridad tanto para su país como para el mundo en general.
“China y Estados Unidos deben ser socios y amigos. Eso es lo que la historia nos ha enseñado y lo que la realidad demanda”, comentó Xi, enfatizando la necesidad de colaboración entre ambas potencias. A pesar de las fricciones en áreas como la manufactura y la tecnología, Xi señaló que es normal que dos economías de tal magnitud no siempre estén completamente alineadas, pero que los beneficios de la cooperación deben prevalecer sobre los desacuerdos puntuales.
El presidente chino también resaltó que el desarrollo de relaciones económicas y comerciales entre ambos países debe ser considerado como un ancla y una fuerza impulsora, no como un obstáculo. A su juicio, las disputas no deben degenerar en un ciclo de represalias, ya que esto solo obstaculizaría el progreso a largo plazo.
Cooperación en el sector tecnológico y el comercio
Durante su encuentro, Trump y Xi abordaron temas clave, como la exportación de chips de computadora avanzados a China. Trump mencionó que empresas como Nvidia están en conversaciones con funcionarios chinos para facilitar el acceso de China a estas tecnologías, lo que podría ser un elemento crucial en las futuras negociaciones sobre comercio y propiedad intelectual.
Por su parte, Xi destacó la importancia de seguir trabajando juntos para superar los desafíos globales. “Hoy el mundo enfrenta numerosos desafíos complejos. China y Estados Unidos pueden asumir juntos nuestra responsabilidad como grandes potencias y trabajar juntos para lograr más avances importantes”, subrayó el presidente chino.
Un futuro incierto pero prometedor
Aunque el camino hacia un acuerdo definitivo aún está lleno de obstáculos y negociaciones complejas, la reunión entre Trump y Xi representa un paso positivo hacia una resolución de las tensiones comerciales. Ambas potencias parecen dispuestas a dejar de lado las represalias para buscar soluciones que beneficien tanto a sus economías como a la estabilidad global.
En resumen, la reciente reunión en Corea del Sur ha abierto una nueva etapa en las relaciones entre Estados Unidos y China, caracterizada por la disposición al diálogo y la colaboración. Mientras ambos países se enfrentan a retos internos y globales, el deseo de avanzar hacia un acuerdo comercial parece ser una prioridad compartida, con la esperanza de que se logre un consenso beneficioso para todos los involucrados.
