Newell’s le ganó a Patronato en Rosario por la Copa de la Liga

Patronato no pudo sumar en Rosario: Newell’s le ganó 1-0 en Rosario y los de Facundo Sava sumaron la segunda derrota consecutiva en la Copa de la Liga Profesional y muy complicados con el promedio del descenso donde ocupan la última colocación. Ramiro Sordo, a los 33 minutos del complemento, marcó el único tanto del encuentro que se disputó en el estadio Coloso Marcelo Bielsa y fue controlado por Néstor Pitana.

 

Newell’s fue muy superior en los primeros diez minutos del primer tiempo, en los que generó tres llegadas claras, que no definió por falta de puntería.

 

A los 4 minutos Francisco González desbordó por la derecha y mandó un centro preciso al medio del área, que Garro cabeceó en palomita, solo, pero la tiró a las manos del arquero Mansilla.

A los 6 minutos Nicolás Castro la metió justa de tres dedos desde la izquierda para la solitaria entrada de Juan Manuel García, por atrás, quien le pegó con el muslo derecho y la tiró afuera.

 

A los 10 minutos Luciano tocó con Garro por la izquierda y éste mandó un centro a Juan Manuel García, quien entró solo por el primer palo y volvió a tirarla afuera.

Patronato, que jugó de menor a mayor en el primer tiempo, logró equilibrar el desarrollo e inclinarlo a su favor en la segunda mitad de esa etapa, aunque careció de llegadas claras para abrir el marcador aunque la levantada fue importante para los de Sava.

 

El complemento mostró el mejor juego de Patronato en el primer cuarto de hora, como a los 4m cuando el arquero debutante Franco Herrera -reemplazó a Ramiro Macagno, lesionado, a los 40m del primer tiempo- anticipó a Alexis García en un mano a mano.

El director técnico local, Javier Sanguinetti, acertó con los ingresos de Justo Giani y el ecuatoriano Reasco, quienes le devolvieron el juego ofensivo y a los 33m Giani desbordó por la derecha, mandó un centro bajo a Reasco, quien la dejó pasar entre sus piernas, y el también suplente Sordo remató de derecha y la clavó abajo, junto al segundo palo, en el golazo que definió un partido durísimo.