Godoy Cruz rescató sobre el epílogo una igualdad con Tigre en Mendoza

Godoy Cruz dominó los pasajes iniciales con los atributos con los que terminó la pasada temporada: presión en la salida de rival, ambición en la búsqueda ofensiva y despliegue colectivo.

Así hilvanó tres situaciones para abrir el marcador: primero Marinelli le ganó un mano a mano a Ortiz, después Ojeda se resbaló cuando estaba para definir frente al arquero y finalmente Bullaude remató apenas desviado desde afuera del área. Pero de a poco Tigre, con argumentos similares, equilibró las acciones. El partido se hizo dinámico pero con pocas ocasiones de riesgo frente a los arcos.

Hasta que a los 36 Menossi ejecutó un corner desde la derecha, Ortiz despejó de cabeza y sobre la medialuna Blondel sacó un zurdazo hermoso y violento, de sobrepique, que dejó sin reacción a Espínola y se convirtió en el 1 a 0.

Fue un premio desmedido para el equipo de Victoria, más allá de que Godoy Cruz una vez en desventaja perdió la línea y se mostró desorientado y vulnerable hasta el cierre de la etapa.