Quién fue San Roque, el protector de los enfermos y los perros

Cada 16 de agosto se celebra el Día de San Roque, el patrono de los perros y de los enfermos y uno de los más populares. Suscitó su devoción a lo largo y ancho de todo el mundo, su imagen se reproduce y se encuentra en muchísimas capillas y establecimientos religiosos.

Según el portal Santopedia, el nacimiento de Roque habría sido fruto de un voto hecho por sus padres que sufrían por no tener hijos. Cuenta la historia que Roque habría nacido por el año 1.300 en la ciudad francesa de Montpellier. Quedó huérfano muy pronto y vendió toda la herencia familiar para entregar los beneficios a los pobres.

San Roque aprendió nociones de medicina en su ciudad natal. Durante su peregrinar hacia Roma puso en práctica estos conocimientos al servicio de los enfermos por la peste negra.

En la ciudad italiana de Cesanea, antes de llegar a Roma, Roque curó a un cardenal y éste lo presentó luego al Papa.

Cuando se dispuso a regresar a su país, pasó por Rímini, hoy convertida en una de las grandes zonas de veraneo de Italia. Allí, predicó el evangelio y continuó con la curación de la peste. En la ciudad de Piacenza, Roque se enfermó y se retiró a un bosque de las afueras de esa ciudad para no contagiar a la población.

Por entonces, y según el relato de Santopedia, recibía cada día la visita de un perro que le llevaba un pan. El can lo tomaba cada día de la mesa de su amo, un hombre adinerado llamado Gottardo Pallastrelli, quien después de ver la escena repetidamente, decidió un día seguir a su mascota.

De esta forma, fue al bosque donde encontró al pobre moribundo. Ante la sorpresa, se lo llevó a su casa, lo alimentó y le hizo las curaciones oportunas. El mismo Gottardo, después de comprobar la sencillez de Roque y de haber escuchado las palabras del evangelio que le enseñó, decidió peregrinar como él.

Fuente:Rosario3