Granja Tres Arroyos, una de las mayores productoras de pollos del país, inició un Procedimiento Preventivo de Crisis en una de sus plantas. La empresa, que brinda trabajo a más de siete mil personas en el país, tiene la mira puesta en otras plantas nacionales.
El objetivo es reducir los costos operativos en medio de la difícil situación económica del sector con una marcada disminución en el consumo. Además, los empresarios del sector mencionan el tipo de cambio poco favorable, salarios más altos que los de Brasil, y la carga tributaria que encarece las exportaciones como algunos de los factores.
Esta es la cuarta empresa que solicita este mecanismo en los últimos meses. La cerealera Vicentín, Fate y Bridgestone ya lo habían pedido.
Despidos
De acuerdo con las fuentes oficiales, “el procedimiento de crisis está vigente, estamos ayudando para que se conserven la mayor cantidad de empleos, todavía no hay definiciones”. Granja Tres Arroyos habría solicitado el despido de hasta 700 trabajadores. Sin embargo no descartan el descuento de pagos adicionales equivalentes al 21% de los sueldos.
En los últimos años, la firma enfrentó varios desafíos, entre ellos la pérdida del acceso al mercado chino luego de la aparición de la gripe aviar en 2023. Este mercado representaba una parte significativa de sus exportaciones. Su cierre implicó una pérdida de 160 millones de dólares para los exportadores de pollos, afectando directamente a Granja Tres Arroyos. Según la empresa, esta situación la obligó a reducir sus exportaciones del 33% al 25% de su producción.
La planta de Ezeiza
El conflicto entre Granja Tres Arroyos y sus trabajadores se centra principalmente en la planta de Ezeiza. Los empleados afirman que la planta está siendo abandonada mientras las otras instalaciones siguen operando “a tope”.
En medio de este conflicto, el gobierno destacó que el sector avícola sigue siendo competitivo en términos de exportaciones. Según la Secretaría de Agricultura, las exportaciones avícolas aumentaron un 20% en volumen y un 26% en valor entre enero y octubre de 2024, pasando de 129.000 a 154.000 toneladas.
Sin embargo, los empresarios del sector continúan reclamando por los costos internos y la presión de un tipo de cambio desfavorable afecta tanto a la competitividad como a la viabilidad de las empresas.
Con información de Clarín
DEJÁ TU COMENTARIO: Los comentarios publicados son exclusiva responsabilidad legal de sus autores.