Tips para sacar el máximo rendimiento del celular

Los teléfonos inteligentes se usan para realizar cada vez un mayor número de actividades. Esto ha provocado que los dispositivos más antiguos o que no son de última generación vayan quedando atrás y presenten más dificultades como menor velocidad de reacción, peores gráficos o dificultad en la interacción. Por ese motivo, en este artículo, repasaremos una serie de consejos útiles para que el celular recupere su estado inicial y, por al menos algún tiempo más, reaccione a las acciones que quiere llevar a cabo el usuario.

Antes de empezar, cabe mencionar que las prácticas más frecuentes hoy en día en este aparato de bolsillo requieren de conexión a internet constante y de una buena resolución de la pantalla. Ejemplo de ello son las populares partidas de póker a través de plataformas especializadas como PokerStars, la visualización de películas o series con Netflix, o el consumo de publicaciones en forma de vídeos y fotografías de Instagram. Son tres de las apps más usadas por buena parte de la población argentina.

La importancia de la limpieza

Son muchas las personas que cuidan del estado exterior de su smartphone, pero descuidan por completo como esté en el interior. Quienes cuentan con una capacidad elevada de almacenamiento apenas se les ocurre el hecho de liberar espacio, una de las principales razones del colapso. Fotos, vídeos, aplicaciones, archivos… Los gigabytes que ocupan son importantes y esto provoca lentitud y calentamiento, así que suprimir aquello que no se necesita es clave para un mayor rendimiento.

Pero no todo es tan evidente como hacer limpieza, sino que también hay pequeños gestos que pueden tener buenas e importantes consecuencias. Eliminar la memoria caché, los datos generados a causa del uso de las apps, puede hacer que se bloquee menos y aumente la velocidad de reacción. En el apartado de configuración, eso es posible en pocos segundos. A su vez, los expertos recomiendan reiniciar o apagar regularmente el dispositivo, pues se restablecerá la configuración del sistema.

 

 

 

Los teléfonos inteligentes se usan para realizar cada vez un mayor número de actividades. Esto ha provocado que los dispositivos más antiguos o que no son de última generación vayan quedando atrás y presenten más dificultades como menor velocidad de reacción, peores gráficos o dificultad en la interacción. Por ese motivo, en este artículo, repasaremos una serie de consejos útiles para que el celular recupere su estado inicial y, por al menos algún tiempo más, reaccione a las acciones que quiere llevar a cabo el usuario.

Antes de empezar, cabe mencionar que las prácticas más frecuentes hoy en día en este aparato de bolsillo requieren de conexión a internet constante y de una buena resolución de la pantalla. Ejemplo de ello son las populares partidas de póker a través de plataformas especializadas como PokerStars, la visualización de películas o series con Netflix, o el consumo de publicaciones en forma de vídeos y fotografías de Instagram. Son tres de las apps más usadas por buena parte de la población argentina.

La importancia de la limpieza

Son muchas las personas que cuidan del estado exterior de su smartphone, pero descuidan por completo como esté en el interior. Quienes cuentan con una capacidad elevada de almacenamiento apenas se les ocurre el hecho de liberar espacio, una de las principales razones del colapso. Fotos, vídeos, aplicaciones, archivos… Los gigabytes que ocupan son importantes y esto provoca lentitud y calentamiento, así que suprimir aquello que no se necesita es clave para un mayor rendimiento.

Pero no todo es tan evidente como hacer limpieza, sino que también hay pequeños gestos que pueden tener buenas e importantes consecuencias. Eliminar la memoria caché, los datos generados a causa del uso de las apps, puede hacer que se bloquee menos y aumente la velocidad de reacción. En el apartado de configuración, eso es posible en pocos segundos. A su vez, los expertos recomiendan reiniciar o apagar regularmente el dispositivo, pues se restablecerá la configuración del sistema.

 

 

Terminamos este repertorio con un clásico, pero no menos importante. Muchas personas navegan por páginas web y aplicaciones y van dando saltos sin haberlas cerrado previamente. Esto hace que la memoria se llene de portales y apps en segundo plano que se están ejecutando y reclamando atención, aunque uno no les saque partido alguno. Por eso mismo, es necesario ir cerrando todo aquello que se abre y revisar de forma periódica cuántas están en funcionamiento. Existe la opción de desactivarlas e incluso de restringirlas.