El santafesino Reinaldo Wabeke, recordado por haber sido esposo de Adelfa Volpes, volvió a dar el “sí, quiero”. Este lunes contrajo matrimonio en el Registro Civil de Coronda, departamento San Jerónimo, con Javier Elías Salazar, su actual pareja y a quien definió como “su gran amor”.
La ceremonia íntima se realizó en una jornada fresca y contó con la presencia de familiares y amigos cercanos. El enlace marcó un nuevo capítulo en la vida de Wabeke, quien tras la pérdida de Adelfa y varios años difíciles, volvió a encontrar la felicidad.
Reinaldo Wabeke alcanzó notoriedad a mediados de la década del 2000 cuando sorprendió a la sociedad santafesina al casarse con Adelfa Volpes, una mujer mucho mayor que él, figura conocida en el ámbito local.
La relación, caracterizada por una marcada diferencia de edad, generó amplia repercusión mediática y controversia pública, convirtiéndolos en una pareja célebre. La historia de amor, sin embargo, también estuvo rodeada de rumores y especulaciones sobre los intereses económicos que habrían motivado el vínculo, ya que Adelfa era poseedora de una importante herencia.
Tras el fallecimiento de su esposa, Wabeke heredó una considerable fortuna, pero su exposición mediática lo llevó a una espiral de decadencia personal.
El descenso: adicciones, condena y vínculos delictivos
Con el paso de los años, la fama se transformó en escándalo. Según recordó una producción del Grupo AIRE, el exviudo de Adelfa atravesó problemas de adicción y causas judiciales. En 2020 fue detenido en la autopista Rosario–Santa Fe, acusado de transportar cocaína.
El proceso judicial culminó con una condena por tráfico de estupefacientes, y durante ese tiempo se descubrió su conexión con una organización narcocriminal liderada por Vanesa “La Curandera” Saravia, una reconocida figura vinculada al culto umbanda y al narcotráfico.
La policía había incautado 147 kilos de cocaína en un operativo considerado uno de los más grandes de la provincia de Santa Fe. Las investigaciones posteriores situaron a Wabeke como uno de los implicados en la red, profundizando su caída de la fama al encierro.
Un nuevo comienzo
Pese a su pasado, Reinaldo Wabeke parece haber encontrado nuevamente la calma. Este casamiento en Coronda representa un renacer personal y un intento por dejar atrás los años de turbulencia judicial y mediática.
Rodeado de afecto y con una vida alejada de los reflectores, el santafesino busca reconstruirse junto a su pareja. “El amor siempre da una nueva oportunidad”, expresó en declaraciones recientes a su entorno cercano.
Fuente Aire de Santa Fe