El joven Nicolás Del Mestre logró evitar el juicio por jurado que debía enfrentar acusado de intentar matar a su pareja en Paraná. La jueza Paola Firpo homologó un acuerdo de probation (suspensión de juicio a prueba) por el plazo de dos años, luego de que la fiscal Mercedes Nin, el defensor Guillermo Mulet y la querellante Claudina Indelman alcanzaran un consenso en la causa.
El caso se remonta a noviembre de 2024, cuando Del Mestre protagonizó un grave hecho de violencia en el departamento de su entonces pareja, Agustín Leiva Chávez, ubicado sobre calle Alameda de la Federación, frente a la sede de la Policía Federal.
En medio de una discusión, el joven tomó un cuchillo de cocina e intentó atacar a Leiva en la cabeza y el cuello. La víctima logró cubrirse con una mano, pero sufrió una profunda herida que requirió atención médica en el Sanatorio La Entrerriana.
Un ataque con arma blanca y daños materiales
Según la investigación penal, tras la agresión, Del Mestre regresó al domicilio y causó importantes destrozos: quemó la ropa de su pareja, arrojó lavandina sobre prendas y electrodomésticos, dañó aires acondicionados y escribió mensajes en las paredes.
“Le cortó hasta el último calzoncillo que tenía”, describió la abogada querellante Claudina Indelman. Además, la letrada recordó que “Leiva logró salvar su vida al cubrirse con la mano; el golpe iba dirigido a la cabeza”.
Inicialmente, el Ministerio Público Fiscal había imputado a Del Mestre por el delito de Tentativa de Homicidio Agravado por el vínculo, un delito que debía ser juzgado por jurado popular. Sin embargo, las partes acordaron recalificar los hechos y avanzar hacia una salida alternativa mediante la probation.
Resarcimiento económico y condiciones
La probation impuesta tendrá una duración de dos años e incluye, un resarcimiento económico hacia la víctima, aunque no se informó el monto, reveló Códigos. Durante ese tiempo, el acusado deberá cumplir con las condiciones que fije la Justicia, como no cometer nuevos delitos y mantener distancia de Leiva Chávez.
El acusado, que cursa estudios de abogacía, enfrenta el proceso en libertad. No obstante, la querellante adelantó que apelará las medidas dispuestas por la jueza Firpo, ya que Del Mestre fijó domicilio a pocas cuadras del de la víctima. “Leiva tiene mucho temor, más aún ahora que el imputado vive cerca de su domicilio”, advirtió Indelman.
El caso, quedará ahora sujeto al cumplimiento de las condiciones impuestas. Si el acusado las incumple, el proceso podría reabrirse y avanzar hacia juicio oral.
Fuente: Elonce
